Cuando un proyecto público fracasa, lo primero que se analiza es el impacto económico, pero pocas veces se profundiza en las causas estructurales. Entre ellas, la ausencia de una asesoría contractual especializada.
1. ¿Por qué tantos proyectos públicos fallan en Colombia?
Según la Contraloría General de la República (informe 2023), más del 37% de los proyectos de infraestructura pública presentan irregularidades. Las principales causas son los incumplimientos en los cronogramas por falta de supervisión jurídica, la inadecuada estructuración financiera del contrato y las sanciones por errores en los criterios de evaluación o adjudicación. Todos estos errores son evitables con una asesoría contractual oportuna.
2. El ciclo completo donde falla el Estado (y donde entra la asesoría)
Planeación deficiente = contrato inviable
Una entidad territorial lanza un proyecto sin estudios técnicos de fondo. El resultado es un contrato basado en suposiciones, no en datos. Aquí, la asesoría contractual puede exigir estudios previos, estructurar correctamente el objeto y prever riesgos.
Pliegos mal estructurados = controversias legales
Los pliegos son la columna vertebral del proceso de selección. Un mal criterio de ponderación, una condición excluyente o un requisito ilegal puede ser causal de nulidad. Con asesoría, se validan los pliegos frente a la Ley 80 y sus normas complementarias.
Ejecución sin adecuado seguimiento = demandas millonarias
Cuando el contrato entra en ejecución sin control técnico-jurídico, las adiciones, demoras y modificaciones descontroladas se acumulan. Luego vienen las demandas, y el daño fiscal es inevitable. Un equipo asesor evita esto con seguimiento y soporte constante.
3. ¿Qué incluye una asesoría contractual integral?
En ACIG Consulting, hemos desarrollado un modelo de asesoría por fases que se adapta a cada etapa del ciclo contractual. Este modelo comprende el diagnóstico legal y técnico, la estructuración de documentos contractuales, el diseño de matrices de riesgo, el acompañamiento en la publicación, observaciones y audiencias, así como el seguimiento contractual con alertas jurídicas y gestión de modificaciones.
4. Beneficios más allá del cumplimiento
La asesoría contractual adecuada evita demandas y sanciones, protege el patrimonio público, genera confianza en órganos de control y permite tomar decisiones estratégicas basadas en información legal sólida.
Conclusión
No tener asesoría contractual cuesta. Cuesta dinero, tiempo, reputación y, a veces, hasta carreras profesionales. En un país como Colombia, donde los proyectos públicos están bajo lupa constante, la asesoría contractual no es opcional: es un seguro de vida para cualquier entidad estatal.
ACIG Consulting está listo para ayudarte a construir con legalidad, eficiencia y transparencia. Porque prevenir es más barato que litigar.
